Vivimos inmersos en la era digital y en todos los ámbitos personales y profesionales tenemos que utilizar, en mayor o en menor medida, dispositivos conectados a la Internet. El trabajo, el estudio y también el ocio cada vez están ligados a ellos.
En particular los videojuegos se han convertido en una forma generalizada de entretenimiento especialmente para los niños y los adolescentes. Sin embargo, el exceso de tiempo que dedican a jugar usando dispositivos electrónicos puede conducir a problemas de adicción, afectando su rendimiento académico, su salud psicofísica y sus relaciones sociales.
A continuación, exploraremos de una manera muy resumida cómo los padres y educadores pueden abordar la adicción a los videojuegos en sus hijos y estudiantes, para brindarles un equilibrio saludable entre el juego y otras actividades.
Si Usted necesita una orientación más amplia y una atención especializada en adicciones a los videojuegos para niños y adolescentes, atenderemos su consulta previa gratuita completando este siguiente Formulario de Contacto.
1. Establecer límites claros:
Es esencial establecer límites de tiempo y horarios para jugar con videojuegos. Los padres y educadores se deben dialogar con sus hijos/estudiantes para acordar cuánto tiempo pueden dedicar a los videojuegos cada día. Además, es importante establecer períodos de tiempo sin usar videojuegos; por ejemplo: durante las comidas o antes de acostarse, para fomentar otras actividades y descanso adecuado.
2. Proporcionar alternativas saludables:
Ayude a su hijo o estudiante a descubrir otras actividades interesantes fuera de los videojuegos. Anímelo a participar en deportes, arte, música o cualquier otro hobby que pueda captar su interés. Esto no solo les proporcionará mayor calidad y satisfacciones de vida diaria, sino que también les permitirá desarrollar nuevas habilidades y ampliar sus intereses y horizontes
3. Fomentar la interacción social:
Los videojuegos aíslan a los niños y adolescentes si pasan demasiado tiempo jugando solos. Los padres y educadores deben alentar a sus hijos a interactuar con amigos y compañeros en entornos sociales reales. Organizar salidas, participar en actividades en grupo o inscribirlos en clubes o clases extracurriculares puede ser una excelente manera de promover interacciones saludables fuera del mundo virtual.
4. Supervisión y comunicación abierta:
Mantenga un diálogo abierto con su hijo, o sus estudiantes, sobre los videojuegos. Asegúrese de comprender qué juegos están jugando, con quién interactúan en línea y qué tipo de contenido consumen. Supervise sus actividades en línea y establezca reglas claras sobre la comunicación con extraños para ayudar a prevenir situaciones peligrosas y garantizar un entorno seguro.
5. Modelar un comportamiento equilibrado:
Los padres y educadores deben ser ejemplos de un equilibrio saludable entre el uso de la tecnología y otras actividades. Si los niños ven que sus padres también dedican tiempo a otras cosas, como leer, hacer ejercicio o pasar tiempo en familia, es más probable que sigan ese ejemplo y eviten la adicción a los videojuegos.
6. Conclusión:
La adicción a los videojuegos en niños y adolescentes es un problema cada vez más común en la sociedad actual. Sin embargo, con límites claros, alternativas saludables, interacción social, supervisión y un modelo de comportamiento equilibrado, los padres pueden ayudar a sus hijos a mantener una relación saludable con los videojuegos y disfrutar de una vida equilibrada y plena.
Considere consultar con especialistas en psicología infantil y adolescente, y en psicopedagogía, para tratar el problema de una manera rápida y efectiva: Formulario de Contacto.
Bibliografía recomendada a padres y educadores para comprender la adicción a los videojuegos en niños y adolescentes:
- Guía Práctica «Tus Palabras Importan» (Centro FLORECER, 12 páginas).
- Guía para padres y educadores sobre el uso seguro de internet, móviles y videojuegos (Fundación Gaudium, 72 páginas).
- Los videojuegos en el ámbito de la familia (Universidad de Oviedo, Aula Abierta, 14 páginas).
- Trastorno por videojuegos: una enfermedad mental al alza entre adolescentes y niños (Universidad de Chile, 1 página).
